A finales del siglo XVIII Cádiz una ciudad volcada con su comercio de Indias y el ambiente mercantil se notaba en cada recodo de sus calles. Había teatros y más de treinta Cafés enriquecidas por un ambiente cosmopolita motivado por una amplia presencia de extranjeros, en especial italianos y franceses, pero también irlandeses e ingleses (cuando no tocaba guerra). Estos suponían casi el 10 por ciento de la población que trajeron, gracias a su enriquecimiento, el gusto por la arquitectura, la ópera y libros con refrescantes ideas ilustradas. Pero nada de eso sobrevivía si regularmente no llegaba la plata de los virreinatos de Nueva España y Perú pues allí se encontraba Casa de Contratación de Indias.
El 7 de agosto de 1765, un año como otro cualquiera en Cádiz escribía la compañía de Eduardo y Jacobo Gough a sus primos Cólogan Valois en el Puerto de la Cruz en Tenerife. Como para los gaditanos, para las islas también era prioritario esta llegada pues muchos pagos se hacían vía Cádiz.
"El Navío de Guerra procedente de Veracruz llegó sin novedad el pasado día 22, junto al Punto Fixo desde Buenos Aires, y dos buques de registro de Carthagena. Entre todos ellos trajeron casi nueve millones en efectivo, que es mucho menos de lo esperado; por el Havana supimos que el 10 de mayo en las inmediaciones de Campeche se cruzaron con la Flota que iba rumbo a Veracruz, por lo que la esperamos muy pronto. El Navío de Guerra Achilles con dos millones por cuenta del Rey; los navíos de los Mares del Sur arribarán en breve, así como el Navío de Guerra Magnanime desde Buenos Aires con el registro del dinero de la fragata Venus que se encuentra detenida allí.
Todos estos suministros son altamente requeridos para facilitar nuestro comercio, que durante los últimos tiempos ha sufrido la mayor escasez de dinero que se haya padecido jamás. Días más tarde llegaba otro navío con mucho más dinero . Días más tarde, llegaba otro navío con mucho más dinero.